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ToggleEl posoperatorio de un aumento de pecho puede traer consigo muchas expectativas y, a veces, preocupaciones. Aunque estés preparada para el proceso, es normal que te preocupen el dolor o las molestias que surgen tras la cirugía. En este artículo, te explicaremos a qué se debe el dolor tras un aumento de pecho y qué puedes esperar en cuanto a la intensidad y duración de estas molestias. Además, te daremos pautas para detectar cuándo este dolor podría ser una señal de alarma.
¿A qué se debe el dolor de pecho tras un aumento?
El dolor en el pecho después de un aumento se debe principalmente a la propia cirugía y a la adaptación de tu cuerpo a los implantes. Durante la operación, los tejidos, músculos y nervios del pecho son manipulados para colocar los implantes, lo que puede causar inflamación y sensibilidad en la zona. Esta inflamación es una respuesta natural del cuerpo al trauma quirúrgico y puede generar una sensación de presión o dolor durante la recuperación.
Además, el estiramiento de la piel y los músculos debido a los implantes también puede generar molestias. La adaptación a la nueva forma y tamaño del pecho puede generar dolor, especialmente al moverse o cambiar de posición. La intensidad de este dolor puede variar según el tamaño de los implantes, la técnica quirúrgica utilizada y tu capacidad de recuperación. Recuerda que estas molestias suelen ser temporales y disminuyen a medida que tu cuerpo se ajusta a los cambios.
¿Cuántos días dura el dolor después de una operación de pecho?
Como hemos dicho, el dolor de pecho tras un aumento forma parte del proceso de recuperación y su duración puede variar según varios factores. En general, el dolor es más intenso durante los primeros tres a cinco días. Durante este periodo se suele experimentar una sensación de presión en el pecho, acompañado de dolor que puede intensificarse al realizar movimientos como levantarse, acostarse o cambiar de posición.
Fases del dolor tras un aumento de pecho
Primera semana
Los primeros días después de la operación son los más difíciles. Es probable que necesites que te receten analgésicos para aliviar las molestias. El dolor puede asemejarse a un dolor muscular profundo o una presión constante en el pecho, debido a la manipulación de los tejidos y el estiramiento de la piel y los músculos para acomodar los implantes. También se pueden notar ardor o pinchazos, que son normales mientras los nervios se recuperan de la operación. Algunas pacientes también pueden notar un dolor de axila en el pecho operado. Esto puede deberse a la irritación de los nervios o a la inflamación de los ganglios linfáticos axilares, una respuesta común tras la cirugía mamaria. Si este dolor persiste más allá de la primera semana o se vuelve más intenso, es importante que acudas a tu cirujano para descartar cualquier complicación.

Segunda semana
El dolor debería empezar a disminuir notablemente a lo largo de la segunda semana. Muchas pacientes comienzan a sentir menos presión y una mayor comodidad al moverse. Sin embargo, es posible que aún sientas alguna incomodidad, especialmente al realizar movimientos con los músculos pectorales, como levantar los brazos o empujar objetos. La inflamación y la sensibilidad pueden persistir, aunque en menor medida. También es frecuente la pérdida de sensibilidad en el pecho o los pezones. Este fenómeno ocurre porque durante la cirugía es posible que se hayan alterado pequeñas terminaciones nerviosas, lo que provoca una disminución temporal de la sensibilidad. La mayoría de las veces, la sensibilidad vuelve en unas semanas o meses, a medida que se recuperan los nervios.
Tercera y cuarta semana
En esta etapa sólo deberías sentir molestias leves. Puede que todavía sientas una ligera tensión en el pecho, especialmente al final del día o después de haber estado activa. Y también es posible que notes una sensación de tirantez en la piel mientras esta se ajusta a la nueva forma y tamaño de los implantes. Además, podría persistir la pérdida de sensibilidad. La inflamación debería haberse reducido bastante en esta etapa, aunque puede que el pecho aún no haya alcanzado su forma definitiva.Primeros meses
En los meses posteriores a la cirugía, es normal experimentar de vez en cuando una ligera sensibilidad o sensación de tirantez, especialmente en respuesta a cambios de temperatura o niveles de actividad física. Además, en algunos casos pueden presentarse complicaciones tardías, como una contractura capsular, que puede causar dolor de pecho operado tras 1 año. Este dolor puede estar relacionado con la formación de una cápsula cicatricial alrededor del implante que se endurece y causa molestias o incluso deformidad en la forma del pecho. Si notas un dolor persistente o que aumenta con el tiempo, es importante que consultes con tu cirujano. Esta fase de adaptación puede durar hasta seis meses, dependiendo de tu ritmo de curación y la complejidad de la cirugía.

Factores que influyen en la duración del dolor
Varios factores pueden afectar la duración e intensidad del dolor postoperatorio:
- Tamaño y tipo de implantes: Implantes más grandes o que se colocan debajo del músculo pectoral suelen provocar más dolor y requieren un tiempo de recuperación más largo.
- Técnica quirúrgica: La técnica utilizada por tu cirujano también juega un papel crucial. Las incisiones y la manipulación del tejido durante la cirugía pueden influir en la cantidad de dolor que experimentas.
- Umbral de dolor individual: Cada persona tiene un umbral de dolor diferente, por lo que la percepción del dolor y la respuesta a los analgésicos pueden variar.
- Actividades postoperatorias: Seguir las recomendaciones del cirujano sobre el descanso y evitar esfuerzos físicos durante las primeras semanas es clave para una recuperación más rápida y menos dolorosa.
Cuándo consultar a tu cirujano
Aunque es normal experimentar dolor durante el posoperatorio, si sientes un dolor que aumenta con el tiempo, aparece repentinamente o está acompañado de enrojecimiento, calor excesivo o secreción en la zona de la incisión, es importante que consultes a tu cirujano de inmediato, ya que podría tratarse de complicaciones.
Cómo tratar el dolor de pecho después de una operación de aumento
Es muy importante que sigas al pie de la letra las indicaciones que te proporcione el cirujano. Aún así, te dejamos algunas recomendaciones generales que, seguro, te vendrá bien seguir:
- Guarda el reposo indicado por tu cirujano.
- Evita levantar peso, realizar esfuerzos físicos intensos o actividades deportivas.
- Duerme boca arriba para evitar presión en el pecho.
- No presiones, rasques ni masajees la zona operada.
- Evita situaciones en las que puedas recibir un golpe en el pecho, como al conducir.
Cualquier operación de aumento de pecho supone lidiar con cierto dolor y molestias; por ello, es importante contar con un asesoramientoprofesional de confianza, que hará que el proceso de recuperación sea adecuado. En la clínica del Dr. Yvan Pacheco, especialista en mamoplastias de aumento en Las Palmas de Gran Canaria y Telde, contamos con tecnología vanguardista y te ofrecemos un cuidado personalizado y riguroso. ¿Buscas un cirujano profesional que te dé confianza? No esperes más, ¡llámanos!